Mi madre trabajaba para una empresa trasnacional como ejecutiva de algunas cuentas de clientes importantes, mi padre la habĂa abandonado hacia 10 años cuando yo apenas tenĂa 6 años, sin la sombra de mi padre y con una madre que generalmente se la pasaba trabajando de 9 a 5 y siendo yo hijo Ăşnico, crecĂ supervisado por niñeras y vecinas a las cuales yo les hacĂa ver su suerte pues siempre fui rebelde y mal educado.
Cuando mi madre llegaba del trabajo era frecuente que mis "cuidadoras" se quejaran de mi mal comportamiento y por ello casi nunca duraban más de 2 meses, eso enfurecĂa a mi madre quien siempre me castigaba dejándome sin mis videojuegos, sin ver televisiĂłn o sin poder salir a jugar con mis amigos del barrio.
Cuando cenábamos ella me gritaba y maldecĂa por mi mal comportamiento gritando "Por que no naciste niña?" y yo le contestaba que quizás si hubiera sido niña de todas maneras seria una niña problemática, algunas veces eso y una sonrisa bastaba para que nos reconciliáramos. La verdad es que dĂa a dĂa nuestros pleitos crecĂan, en un par de ocasiones mama llego a correrme de la casa y yo me fui a casa de mis amigos unos vecinos, mama lo sabĂa y al dĂa siguiente hacĂamos un pacto de paz que duraba unas horas.
Al cumplir 16 años mi madre me hizo prometerle que serĂa más maduro y me comportarĂa mejor, que ya no contratarĂa niñeras pero debĂa ayudar en casa y yo acepte pues comprendĂ el daño que le estaba causando.
Una tarde Mama llego del trabajo y me llamo para platicar, me comento que su jefe le estaba pidiendo que fuese a trabajar con Ă©l a España en una nueva oficina que tenĂa la compañĂa, me explico que tendrĂamos que cambiar de residencia a un pequeño pueblo cercano a Barcelona y que debĂa llenar algunos papeles para tramitar mi pasaporte y mi visa por lo que me pidiĂł que de inmediato llenara las formas y se las entregara, yo me puse toda la tarde a llenarlas y al final se las entregue.
Los dĂas pasaron y finalmente fuimos a la oficina de inmigraciĂłn a recoger los pasaportes, luego iniciamos el trámite de las visas tanto en el consulado norteamericano como en el de España lo cual tardo unas semanas más.
Una vez que obtuvimos los documentos se planeo el viaje, este serĂa inicialmente corto pues Mama querĂa saber primero si le convendrĂa su nuevo empleo por lo que preparamos maletas para una semana solamente. Era el mes de Mayo cuando iniciamos nuestro viaje saliendo del aeropuerto de la cd. De Mexico rumbo a la ciudad de Huston Tx. en donde abordarĂamos el aviĂłn a España.
Mi odisea inicio cuando llegamos a los Estados Unidos a las 10 de la mañana pues aun que nuestra conexiĂłn con Iberia estaba programada hasta las 8:00 de la noche mi madre quiso documentar nuestro equipaje pero al solicitar los documentos el operador de la aerolĂnea le indico a mi madre que mis documentos no estaban en orden pues mi pasaporte indicaba que el titular del mismo era una persona de nombre Adriana Mendoza Rivas y en la parte correspondiente al Genero manifestaba ser de Sexo Femenino y que al ser yo hombre y no llamarme Adriana sino Adrian se entendĂa que era una persona distinta a la que muestra el documento, mama alego que la fotografĂa si correspondĂa pero aĂşn asĂ no permitieron que documentara mis maletas indicándole mi madre que se trataba de un error pero el operador comento que de todas maneras si es que me permitĂan abordar el aviĂłn al llegar a España serĂa deportado por falsedad de documentos. Mi madre le dijo al operador que buscarĂa lo forma de corregir el problema y el operador le dijo que el solamente estarĂa en el mostrador hasta las 5:00PM pues hacĂan el cambio de turno por lo que sugiriĂł que fuĂ©semos al consulado Mexicano y regresáramos antes de esa hora.
Mama tampoco documento y al salirnos de la fila fuimos a un cafĂ© para pensar como resolver el problema. Sentados en un cafĂ© del aeropuerto me dijo que lo bueno era que las autoridades de migraciĂłn norteamericanas no se habĂan dado cuenta del error puesto que de ser asĂ tampoco me hubieran permitido la entrada e USA, luego se puso a ver los documentos y me dijo "Esta es tu culpa pues seguramente tachaste el recuadro de "F" en lugar del de "M" en la solicitud y probablemente los que elaboraron el documento al ver que se trataba de una persona del sexo femenino te cambiaron el nombre de Adrian por el de Adriana." Luego me dijo "Debemos encontrar la forma de arreglar esto, si vamos al consulado perderemos varias horas de camino y no sabemos si finalmente te arreglaran tu pasaporte o si podemos hacerlo antes de que el vuelo a España saliera", y con una sonrisa maliciosa me vio diciendo "a menos que……. " yo pregute "Que que?" ella me dijo " A menos que te disfrace de Adriana" yo la vi con enojo y le dije "De ningĂşn modo, yo no viajare como muchacha hasta España, serĂa muy humillante para mĂ el que todos me vieran como niño raro". Mama insistiĂł, mira te llevo al Mall que esta frente al aeropuerto y prometo comprarte todo lo necesario para que nadie sospeche que eres hombre, solo dĂ©jame intentarlo cariño si funciona solo serás muchacha unas horas, además será una bonita aventura que luego podrás contar y reĂrte de ella y si no funciona pues iremos al consulado".
Finalmente yo accedi, fuimos a rentar un locker para dejar nuestras maletas y tomamos un taxi rumbo al mall. En el Mall fuimos directamente a una tienda llamada "Sweet fifteen´s" en donde vendĂan todo tipo de ropa para chicas jĂłvenes, mama de inmediato fue hacia una dependienta y como ella habla muy bien el ingles no supe que trataron, solo veĂa que la dependienta me veĂa y se le dibujaba una sonrisa enorme, pronto fuimos al área de vestidores de dama, mama me indico que me encerrara en un cubĂculo mientras ella y la dependienta buscaban mi nueva ropa de mujer, antes de salir mama me indico que me desvistiera totalmente para ganar tiempo
Cuando mama regreso tenĂa en su mano algunas prendas de colores, eran pantaletas , brasier, blusa y una minifalda, al verlas me asuste y le dije a mama "ya me arrepentĂ, mejor no" pero mama me dijo "no estamos jugando, PONTELAS", sin mas remedio inicie mi transformaciĂłn, primero me puse unas panteletas de un material muy suave y femenino, eran rosas y con un moñito al frente, me ajustaron muy bien, luego me puso un brasiere que dijo era de entrenamiento, tambiĂ©n era del mismo color, creo que era un coordinado, el brasiere lo relleno con unas formas de color carne parecidas a pequeñas almohadas de hule espuma forradas, de inmediato aparecieron mis propias bubys, luego vino una blusa rosa y encima una negra de tirantes, tambiĂ©n una faldita de olanes rosas muy cortita, ambas de una textura suave, luego vio mis piernas y me dijo que tenĂa algo de pelos pero que no habĂa tiempo para rasurarlos por lo que me trajo unos leggins de lickra de un color negro muy ajustados pero de una textura muy suave, mama me dijo "ponte tus tenis, pagaremos y vamos a la zapaterĂa", yo entre en pánico de inmediato y le dije que no querĂa salir que parecĂa un muchacho con faldas, pero mama me saco casi a fuerzas y me dijo que aun no terminaba de transformarme, llegamos a la caja y con sorpresa vi que mama pagaba por mis cosas y además nos llevamos varios collares de fantasia que me dijo "Pontelos", y tambiĂ©n llevĂł varios pares de pantaletas, bresieres, unas pantimedias y otro juego de falda y blusa color amarillo con blanco, yo le dije a mi madre que para que querĂa mas ropa de chica y ella me contesto que venĂan en juegos de 3 y debĂa llevarlos.
Al salir de la tienda fuimos a una zapaterĂa y mama pidiĂł unas sandalias rojas abiertas pero altas, no tenĂan tacon delgado eran como de plataforma de corcho con unas tiritas pero de unos 3 pulgadas de alto, me quedaron bien pero mis pies y mis dedos estaban a la vista. En la tienda la dependienta me sonreĂa exageradamente pues era obvio que sabĂa que era un muchacho vestido de chica, yo estaba rojo de vergĂĽenza y humillaciĂłn, intercambiaron algunas palabras entre la dependienta y mi madre pero no entendĂ, solo vi reĂrse con su mano en la boca a la dependienta cuando salimos, yo temblaba de nervios y trataba de equilibrarme en mis zapatillas altas, parecĂa que caminaba de puntitas.
Al caminar por el Mall, poco a poco me fui ajustando a mis nuevas sandalias, mi madre me adiestro en caminar dando pasos cortos y poniendo un pie frente al otro en cada paso, paramos en una tienda de aretes y mi madre me pidiĂł que me sentara en una silla, ella y la chica que vendĂa los aretes hicieron algĂşn trato fuera de mi comprensiĂłn, el hecho es que en unos minutos la chica me perforo una de mis orejas y yo replique a mi mama "Pero mama porque me agujeran mis orejas?, yo no quiero" pero ella me dijo "Los siento cariño pero no tenĂan aretes de clip, pero no te preocupes pues tus agujeros se cierran en unos dĂas cuando no tengas aretes puestos" luego me perforaron la otra oreja y en un minuto sentĂ que algo se movia en mis oĂdos, pedĂ un espejo y para mi sorpresa estaba yo con dos aretes blancos con un corazĂłn rosa atadas a mis oĂdos, la vendedora ato a mi cuello una cadenita muy femenina con otro corazĂłn rosa que hacĂan juego con mis aretes, llorando le dije a mi mama que si no serĂa posible que solo fuesen unas bolitas pequeñas pero ella me dijo "si queremos que todos crean que eres chica debemos ponerte lo que las chicas de hoy están usando y eso es lo que la vendedora me sugiriĂł"
Me sentĂ muy humillado pues por los pasillos del Mall andaba yo caminando en mis sandalias de plataforma con blusa y minifalda, en leggins y con aretes, yo todo un chico vestido con todas estas cosas tan femeninas, por supuesto que toda la gente se me quedaba viendo. Muy humillado le dije a mi mama que si no serĂa posible que hiciera algo en mi cara para no parecer un muchacho y ella me dijo "Que bueno que lo pides, dĂ©jame ver que podemos hacer", por lo que de inmediato pregunto a un vigilante por un salĂłn de belleza y el vigilante le señalo hacia el otro lado del Mall por lo que caminamos varios cientos de metros yo me moria de la vergĂĽenza pero finalmente llegamos a un salĂłn de belleza, al entrar, al igual que en las otras tiendas mi madre platico con la encargada cosas que no entendĂ y de inmediato me llevaron a un sillĂłn para lavar mi cabello, despuĂ©s de lavar mi pelo me sentaron en otro sillĂłn frente a un espejo y dos chicas se pusieron a trabajar en mi, una iniciĂł con el corte de cabello y la otra me saco mis sandalias y se puso a trabajar en mis pies, yo sabĂa que algo estaban haciendo con mis uñas y me dije "Dios mio me van a pintar mis uñas de los pies", la otra chica hizo algunos cortes y luego trabajo con la pistola de aire y con algunos cepillos, la chica que pintaba mis uñas del pie termino la primer capa de pintura e inicio con las uñas de mis manos, la chica que me peinaba saco unos pedazos de pelo largos y se puso a atarlos sobre mi pelo, luego vi que la chica que me arreglaba las uñas de mis manos abria una caja que decĂa "Acrilic Nails" por lo que me imagine que me pondrĂan uñas falsas en mis dedos, al terminar con mi peinado la chica saco una mesa con muchos cosmĂ©ticos, y con unas pinzas me estaba quitando pelos de mis cejas, esto me dolĂa mucho pero ya nada podĂa hacer. Una vez que terminaron con mis uñas y mi pelo yo no podĂa verme pues giraron mi sillĂłn y el espejo me quedo de espaldas, solo podĂa ver unas enormes uñas color rosa en mis dedos de las manos, la señorita que me sacaba mis cejas me pasaba varias brochas sobre mi cara, se sentĂa bien un poco de cosquilleo, luego pintaron mis labios y cepillaron mis pestañas, me calzaron nuevamente mis sandalias y me pusieron mi banda en el pelo, dieron vuelta al sillĂłn y ambas chicas gritaron en son de triunfo "TAARAAAAN", me mire al espejo y no pude reconocerme, veĂa a una chica de unos 18 años muy bonita, me pare y quede maravillado, mis sandalias mostraban unas preciosas uñas rosas adornadas por pequeñas florecitas que hacĂan juego con mis uñas de manos y mis labios, mi pelo estaba increĂble, largo ondulado y tenĂa un fleco muy femenino, mis aretes hacĂan juego y me sentĂ totalmente una chica, creo que a partir de ese momento cambie a moverme como chica ante la sonrisa de mi madre que de inmediato me abrazo diciĂ©ndome, "eres una mujercita muy bella, la hija que siempre quise tener", comprendiendo todo apartĂ© a mi madre y trate de verme menos femenino diciĂ©ndole "Ok mama pero recuerda que todo cambiara en España verdad?" mi madre sonriendo contesto "Ya veremos, quizás seas tu quien ya no desees cambiar". Mi madre se dirigiĂł al mostrador para pagar y vi que pidiĂł algo, la encargada le entrego un esmalte de uñas, un tubo de pintura de labios, un tubo de pintura de pestañas y unas cajitas de colores que supuse eran cosmĂ©ticos para ojos y cara, le recordĂ© a mi mama que no era necesario comprarlos pero dijo "solo en caso de que necesites retocarte".
HabĂan pasado apenas un par de horas asĂ que tenĂamos mucho tiempo para nuestro vuelo por lo que nos dispusimos a comer algo, en el restaurante vi lo difĂcil que era manejar mis manos con las uñas largas, no podĂa agarrar nada, ni una servilleta y le comente a mama "No se como lo hacen, no puedo agarrar nada con estas uñas tan largas" Mama me comento, "Es cuestiĂłn de práctica, en unos dĂas ya no lo notaras" Respondi "Dias? Si solo estare con esto unas horas verdad?" Mama solo se sonrio. Terminando fuimos a pasear por el mall como madre e hija, fue muy divertido, sin embargo me sentĂa muy humillado frente a mi madre cuando los muchachos que paseaban por el Mall me coqueteaban o trataban de entablar alguna conversaciĂłn, mi madre estaba feliz y muy divertida yo no sabĂa dĂłnde poner mi cara avergonzada. Mama me tomo de la mano y entramos a una tienda de bisuterĂas, me compro pulseras, anillos, collares, una pequeña bolsa rosa y algunas otras cosas como pestañas y uñas postizas, aretes, y hasta un sombrero muy femenino, pago todo y lo metiĂł en la bolsa rosa e hizo que la llevara por todo el Mall hasta abordar el taxi que nos llevarĂa al aeropuerto.
Llegamos al aeropuerto a las 5:00 PM., fuimos al locker retiramos nuestras maletas y fuimos al mostrador de Aerolineas Iberia, revisamos que no hubiese ninguno de los operadores que habĂa por la mañana y nos formamos en una fila donde la operadora era una chica, mi madre le mostro los documentos y yo estaba muy nervioso, la chica miro mi pasaporte y me dijo "Adriana Mendoza Sifuentes, Hoo estas mucho más linda en persona que en la foto", yo dije "Gracias" y sonriendo nos dio nuestro pase de abordar.
Yo estaba feliz pues habĂamos librado el primer obstáculo, mi madre me llevo al baño de damas y me dijo que debĂa tratar de hacer mi voz más femenina, me recordĂł que mientras este vestido de mujer debo sentarme en el baño al orinar y siempre cargar mis cosmĂ©ticos para retocarme, ella retoco mis labios con el lipstick y me puso algo de su perfume diciĂ©ndome "Estamos listas Adriana, vamos a conquistar a los Españoles", me sentĂ incomodo cuando mama me llamo Adriana y me trato como mujer pero no quise darle importancia, despuĂ©s de todo estaba totalmente transformado en una chica, salimos del baño y nos fuimos a la sala de espera, mama me compro unas revistas para entretenernos pero eran de chicas y solo tenĂan reportajes y fotos de ropa femenina y algunos consejos de maquillaje, le dije a mi madre "Mama por dios, me hubieras comprado al menos una revista de autos o de crucigramas pero esto es para muchachas" ella sonriĂł y me dijo "Debemos evitar sospechas y sacando un espejo y un rĂmel me dijo, toma retoca tus pestañas", yo hice lo que me pidiĂł y ahĂ me tienen un muchacho en ropa de chica pintando sus pestañas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Huston Texas.
Esa historia no es tuya, la leĂ antes
ResponderEliminarNo puso que era suya xd , en el tĂtulo puso el autor ... .
ResponderEliminar